Cuando tengo la oportunidad de entregar los encargos en mano, no lo dudo ni un segundo. Poder vivir ese momento, ver la reacción y compartir la historia detrás de cada pieza, es uno de los regalos más bonitos de este trabajo.
Hace unos días, en uno de mis viajes, pasé por Burgos y aproveché para hacer una entrega muy especial en persona.
El destino: Farmacia Cid, en la calle Cid 45, en Burgos. Allí me esperaba una pared perfecta para albergar un herbario hecho completamente a medida y bajo encargo.
Este herbario fue particularmente bonito porque tenía un propósito claro: todas las plantas seleccionadas debían tener aplicaciones medicinales, para una farmacia es lo suyo,¿ no? Lo cierto es que no fue nada difícil cumplir con esa petición, ya que prácticamente todas las plantas poseen propiedades curativas. Esa es, para mí, una de sus cualidades más mágicas de la botánica.
Cada lámina de este herbario fue elegida con cariño, pensando en la historia y el simbolismo de cada planta, y cómo podría conectar con el entorno de la farmacia y con quienes la visitan.
La pieza se terminó de realzar con una enmarcación estilo Montparnasse, que encaja a la perfección con la estética y el ambiente de la farmacia. No podría haber encontrado un mejor lugar para este herbario.
Estoy muy agradecida a la Farmacia Cid de Burgos, por la confianza, la acogida y el cariño con el que recibieron esta obra.
¿Te apetece verlo en persona?
Si estás en Burgos o pasas cerca, te invito a que te acerques a Farmacia Cid, en la C/Cid 45. Verlo colgado en su lugar es una experiencia en sí misma, y quién sabe… quizás también te inspire a conectar con el poder natural de las plantas. 
